martes, 15 de julio de 2008

CARTA ABIERTA A LA LUNA

Quisiera decirte...

Me gustaría serte franco y con un par de copitas de merlot/shiraz encima, hablarte. Ahora que te leí y que te veo como periodista reconocida pienso en que no tienes tiempo ni ganas de soportar a un polizonte que apenas conoces. Mi deseo pasa simplemente porque me identifico con lo que escribes y como tanta gente, en como lo haces. Pero algo me corta, imagino lo que podrías pensar… “al tipo no lo conozco (1) nunca lo conoceré en persona (2) y, claro que si me importa, como todos, todos me importan (3)”; y es ahí donde me veo como un “alguien más” digerido como “un tipo extraño”, lo que está perfectamente bien, sé que lo está, y es natural.
Ahora bien, lo que trato de decir, lo que apenas encuentro como expresar, es que me espanta la idea de que los extraños dejen de tener una oportunidad. Porque cuando crecemos aprendemos a sobrellevar tanto el éxito de las victorias como el dolor de las derrotas y obtenemos instintivamente nuestro traje a la medida, nuestra armani-dura para la distancia, la impenetrable vestimenta que nos cubre las heridas viejas pero que nos muestra elegantes, y claro, es comprensible, pues como te decía, tanta vida en carne viva, asusta.
Nomás era eso
Te quiero
Gos

Pd: ¿ahora entiendes lo del fantasma perdido? Es un mal bebedor…¡¡¡pero lo disfruta!!!

2 comentarios:

Achernar dijo...

"Consumiendo Libertad"... es uno de mis blogs preferidos.

Saludos

GUSTAVO dijo...

Me fascina y me causa una curiosidad animal...
Te felicito a ti por tu blog a la que pienso visitar con frecuencia también.